Son dos rompecabezas... uno de ellos desliza y el otro arma. De modo que es hora de ubicar las piezas en su lugar. Pensamos que sin pistas la actividad puede ser mejor... dale, afina tu mirada de observador de aves.
Esta "reinita" está esperando ser armada. Parece ser el reto más sencillo de los muchos que tiene que enfrentar en su travesía. ¡A jugar!
Créenos, ahí hay un loro. El nombre y sus partes van apareciendo poco a poco. Paciencia y atención: uno de los secretos de un buen observador de aves. ¡A jugar!